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Miembro de bronce
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El flagelo del crimen persiste en Lima, y una tragedia estremeció a los residentes del asentamiento humano Santa María, en San Juan de Lurigancho, durante la madrugada del jueves 7 de diciembre. Dos amigos, Luis Roberto Urpay Barrientos y Jeferson Miguel Chacpi Pacora, perdieron la vida en un brutal ataque perpetrado por presuntos extranjeros, quienes, según se sospecha, actuaron en busca de venganza. El sonido de los disparos y las imágenes captadas por una cámara de seguridad atestiguan la violencia del suceso.
Según información confirmada por América Noticias, ambos hombres fueron víctimas de disparos de armas de fuego después de ser sometidos a una violenta golpiza por parte de ciudadanos venezolanos, quienes, tras el crimen, se dieron a la fuga por la parte alta del sector. Los indicios preliminares sugieren que Urpay Barrientos fue secuestrado inicialmente en un automóvil negro, donde se vio obligado a revelar la ubicación de la residencia de Chacpi Pacora. Posteriormente, ambos fueron golpeados brutalmente y baleados indiscriminadamente antes de que los agresores escaparan en el mismo vehículo.
Un familiar de una de las víctimas relató al noticiero: «Mi primo salió a las 10:20 p.m. a comprar, y me dijo que volvería en media hora. Pero lo vi inquieto, y luego me informaron que le estaban pegando, que eran unos ‘Chamos’. Le propinaron dos golpes en la cabeza y lo subieron a un carro».
Tras el ataque, los residentes locales intentaron socorrer a Miguel Chacpi llevándolo al hospital de Canto Grande, ya que aún mostraba signos vitales, a diferencia de Luis Urpay, quien lamentablemente falleció en el acto. A pesar de los esfuerzos, Chacpi llegó sin vida al hospital.
Las autoridades policiales sugieren que el doble homicidio podría estar vinculado a un acto de represalia, ya que las víctimas participaron previamente en el linchamiento de un ciudadano extranjero, como captaron las cámaras de seguridad. Agentes del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) se encuentran en la escena para recopilar pruebas e identificar a los responsables, quienes se presume son de nacionalidad venezolana.