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Los familiares de Alfonso Augusto Utrilla Solís, el empresario asesinado y descuartizado en la provincia limeña de Barranca, exigen justicia para este hombre dedicado a la agricultura y al comercio de harina. “No solo mataron a una persona, sino que se destruyó a una familia completa”, dijeron.
Por este crimen se ha detenido a cuatro delincuentes extranjeros.
Sin embargo, el cabecilla está prófugo, aunque plenamente identificado. Se trata de Alberth Antonio Amundaray Machado, un venezolano con referencias criminales y requisitoria por homicidio en su país.
José Luis Torres Delgado (20), Jorge Luis Hernández Mayta (19), Alimar Graciela Rivas Solórzano (18) y Alisbeth Alexandra Díaz Traviezo (18), todos de nacionalidad venezolana, son interrogados por agentes de la División de Homicidios.
Alfonso Utrilla salió de su casa la noche del último domingo y no volvió. Al día siguiente, su hermana Darcela denunció su desaparición en Barranca.
A través de un video se observa que la víctima ingresa pero no sale de un inmueble ubicado en la cuadra 10 de la av. Francisco Vidal, en Supe. Cuando la policía ingresó halló manchas de sangre en la habitación n.º 29 y en la n.º 22 encontró los restos seccionados de Utrilla Solís. También el cuchillo y un martillo, utilizados en este horrendo crimen.
La administradora del edificio confirmó que la habitación 29 era alquilada por el ahora prófugo Alberth Amundaray. Los otros cuatro detenidos que también vivían en ese edificio habían permanecido en el escenario de los hechos. Sobre la hipótesis del crimen, la policía baraja una posibilidad: que la víctima se haya negado a revelar las claves de sus tarjetas de crédito y que haya sido acuchillado en medio de una discusión.
Descanza en Paz:
